CAPITULO 11: un soltero menos

Despedida de soltero

Mi amigo Daniel no tuvo mejor idea reunirnos a Ignacio y a mí para darnos una noticia genial: muchachos me toco a mí, me caso. Bueno, yo era el único soltero en ese momento y me tocaba el rigor de hacer la despedida de soltero. Recordé aquella “bienvenida de soltero” que me hicieron mis amigos así que no podía quedar nada mal.
A comprar trago, comprar bocaditos y contratar a alguna bailarina exótica para alegrar la noche. Pedro, mi amigo el traumatólogo vivía solo en un penthouse y se ofreció a dar el local.
Estaba todo preparado, todo fríamente calculado. Pero como todos somos médicos teníamos que coincidir en un día que pudiéramos asistir. Quedaba un solo día y era un viernes, era un día antes de la boda, Aurora la flamante novia es pediatra y como médico sabe perfectamente las mil y una peripecias que hacemos en el hospital para darnos una escapada, así que esa noche estaba atenta a cualquier movimiento. Llamó por teléfono a la esposa de Ignacio y lo cagó. No lo dejó ir. Llamó a la novia de Raúl y tampoco lo dejó ir, ya solo faltaba que llame a mi mamá para que no me deje ir.
En fin, con varios heridos menos éramos 10 en total en la fiesta. Ya instalados en aquel departamento en el último piso y con una vista impresionante de las playas de miraflores de noche, empezó la fiesta. Ya con unos buenos tragos encima y con los discursos del caso al futuro “marido oprimido” dimos paso al show, entro al departamento una chica que hacia desnudos con su boa, era una charapa de esas que tiene un culo grande y redondo.
Daniel emocionado se puso a bailar y la chica no tuvo mejor idea que ponerle el bendito reptil en el cuello, ya con la borrachera que tenia se fue tambaleando de lo pesada que estaba hasta el balcón, salimos corriendo a agarrarlo antes de que caiga 10 pisos abajo, cuando vimos volar por los aires a aquella maldita boa que cayó en el piso de abajo.
La bailarina exótica casi lo estrangula a Daniel: oe, me vas atraer mi boa en este instante o les armo un escándalo aquí mismo.
Pedro estaba paralizado, quería estrangular también a Daniel: eres una bestia, sabes quien vive abajo? –nop-respondió Daniel ya con voz aguardentosa- pues vive el jefe de la comisaría de miraflores.
Y ahora como mierda hacemos para sacar a aquel bicho de esa terraza. El hermano de Daniel, que es una mezcla de arnold schuarzenegger y pee wee sherman y que estuvo muchos años en la escuela de infantes de marina, en donde creo que le hacian experimentos termonucleares en el cerebro; no tuvo mejor idea que bajar por el ascensor y tocar el timbre del departamento de abajo.
Al abrirse la puerta, Salio la empleada doméstica y le pregunto si necesitaba algo?
Muy fresco le dijo: si, vengo a recoger mi culebra que se me ha caído por el balcón. Aquella pobre muchacha quedo paralizada. Entro directo al balcón, cogio aquel bicho con sus manos y salio caminando como entró. Al cerrarse la puerta se escucho un grito desgarrador: ahhhhhhhhhhhhhh.
Era la empleada que no daba crédito a aquel espantoso monstruo selvático. Pues después de aquel grito el dueño de casa Salió corriendo a agarrar al causante de tremendo acto. Subió al piso donde estábamos nosotros y dispuesto a terminar con aquella reunión tan divertida. Toco la puerta y dijo: que pasa aca!!!!!!!!!! cuando de pronto, nuestra querida bailarina exótica grito:
Pepe!!!!!!!!!!!!.
El jefe de la policía no sabia donde meter la cara. Nos miró a todos y dijo: bueno muchachos, podrían bajar un poquito el volumen de su música?
Dicho esto, Daniel no tuvo mejor idea que gritar a voz en cuello: vamos a recoger a Ignacio a su casa.
Pues en un acto temerario y propio de escuela de rangers, fuimos en busca de Ignacio.
Con la premisa de que estaba altamente vigilado por su esposa gracias a los buenos consejos de aurora la futura esposa, fuimos a la casa de Ignacio. Me baje del auto y toque el timbre.
Que haces aca? Me dijo Ignacio, si mi mujer te ve nos mata a los dos- me dijo.
Ya con unos buenos tragos encima y casi necio le dije: si no vienes con nosotros, te jodes y entramos a tu casa y armamos el tono aca mismo. Eran las 1 de la madrugada. Ignacio en bata de dormir, cerró la puerta y dijo, ya que chucha, pues vamos.
Todos dispuestos a seguir la juerga, nos dirigimos a un local de mala muerte en la avenida la marina, completamente ebrios y desinhibidos por el alcohol seriamos capaces de cualquier cosa.
Sentados en una mesa de aquel bar, el hermano de Daniel, ese muchacho salido de una revista de experimentos cerebrales nucleares se paro en la mesa y con una botella vacía de ron en la mano grito: a ver quien de este local puede hacer esto?, acto seguido vi como aquella botella se quebraba en mil pedazos en su propia cabeza. Las cien personas aproximadamente, nuestra bailarina exótica y hasta la boa se quedaron con la boca abierta. Yo esperaba que se caiga o algo parecido. Se bajo de la mesa y se tomo un vaso completo de ron con coca cola. Luego de aquel silencio. Estallo una de aplausos en aquel local y lo ovacionaban como a un héroe. Créanme que hasta el día de hoy no recuerda haber hecho semejante estupidez.
Ya amanecía y quedaban pocas horas para la boda que se realizaría a la una de la tarde en una iglesia miraflorina.
Lleve a Ignacio a su casa completamente ebrio, nos fuimos con Daniel a alistarlo para la boda su hermano y yo. En realidad estábamos tan borrachos que nos quedamos dormidos todos. Por un instinto natural y casi sobrehumano abrí los ojos y mire mi reloj; daban las 12 del día: ay chucha, despierten, Daniel te tienes que casar!
Que? Quien? Yo? Dijo medio dormido…………………….si, tu imbecil.
No se como en treinta minutos estábamos todos de traje y saliendo a la iglesia. Llegamos 5 minutos antes de la boda, la mamá de Daniel estaba desesperada, me cogió de una oreja y me dijo: pero donde mierda han estado?,apestas a licor!, me sentí como un niño que hizo alguna travesura en el jardín de infancia.
La mamá de Daniel lo agarro de las solapas y le preguntó:
Te sientes bien?......................................no se mamá, no siento la cara. Respondió.
El hermano de Daniel dijo: que raro? Yo no siento la cabeza.
Ya dentro de la iglesia, me puse al costado de Ignacio, su esposa me miraba con odio y me dijo al oído: te voy a matar terminando la ceremonia.
Al entrar aurora a la iglesia y acercándose al altar su sonrisa se iba apagando, conforme iba mirando la cara de estupido de Daniel con sus ojos rojos por la mala noche y el olor a licor que despedía. Al pararse junto a él lo miro a los ojos y le dijo:
Hola amor, estas listo?
Yo no se porque cuando alguien se rie en un momento así, pues la risa se contagia. Ignacio empezó aquella ola de risa que me contagió a mí, en ese instante Daniel nos quedo mirando y soltó una carcajada: si estoy listo…… jajá jajá.
El sacerdote los miró y dijo: pues que bien que estén contentos! Empecemos.
Un momento, creo que voy a vomitar! Dijo Daniel en voz baja. Para esto Aurora estaba del color rojo encendido y no precisamente por el maquillaje.
Nos acercamos a Daniel con Ignacio y lo sacamos por un costado.
Todos en la iglesia se preguntaban que estaba sucediendo?
A los pocos minutos regresamos los tres, uno a cada lado de Daniel para que no se cayera. En fin, la ceremonia prosiguió y cada vez que el cura preguntaba algo, los tres respondíamos: si padre.
Al terminar la ceremonia y luego de los saludos y cuanto rito hay que cumplir en estas ceremonias, Aurora muy enfadada con Ignacio y conmigo nos miró a los ojos y dijo en tono amenazante y con los ojos a punto de explotar como petardos de dinamita:
Los espero el lunes temprano en el hospital y espero que todo este en orden.
Bueno, olvide mencionarles que Aurora era nuestra jefa.

DE LAS MEMORIAS DE MI VIDA. GERARDO